El Gobierno español aprobó el pasado 5 de octubre las nuevas propuestas fiscales para el año que viene 2023 y que afectarán sobre todo a los grandes patrimonios y empresas, además de añadir importantes novedades en impuestos como el IRPF y Sociedades.
Dentro de las preocupaciones que inquietan al ciudadano común y a los empresarios es saber en qué medida les va a afectar tanto negativamente como de forma positiva ya que entre las principales novedades anunciadas destacan el nuevo impuesto de solidaridad de las grandes fortunas y rebajar la carga fiscal de las rentas bajas en cuanto al IRPF.
En relación con el nuevo impuesto de solidaridad de grandes fortunas cabe indicar que sólo afectara a los patrimonios netos superiores a los tres millones de euros, aunque se muestra como un impuesto nuevo, en realidad se trata de una copia del impuesto al patrimonio, ya que las reglas de valoración de los bienes y los beneficios son los mismos y también la deducción de las deudas o la exención de la vivienda habitual hasta 300.000€. El tipo de gravamen que se aplicará será del 1,7% a patrimonios entre 3 y 5 millones, un 2,1% entre 5 y 10 millones y los que superen los 10 millones se les aplicará un 3,5%.
Para evitar la doble imposición los ciudadanos podrán deducirse de dicho impuesto estatal el importe a pagar que resulte del impuesto sobre el patrimonio aplicable en cada comunidad autónoma. Aunque se prevé de que este será de manera transitoria, se incluirá una cláusula de revisión para evaluar su vigencia.
Con respecto al impuesto de la renta de las personas físicas se añaden diferentes medidas cuyo objetivo tributario es la reducción de los impuestos de las rentas mas bajas e incrementar los tributos en las altas.
Los rendimientos de trabajo cuyos salarios que estén por debajo de 21.000€ tendrán derecho a reducción (actualmente es hasta los 18.000€) y además el mínimo exento para declarar pasa de los 14.000€ a los 15.000€.
En cuanto a las rentas de capital, todos aquellos rendimientos de capital mobiliario y ganancias patrimoniales que estén entre 200.000€ y 300.000€ tributaran al 27% y a partir de los 300.000€ un 28%.
A los autónomos estas medidas también les beneficiará ya que se eleva la cuantía deducible en concepto de gastos de difícil de justificación al 7% con un importe máximo de 2.000€, y para los que tributen en módulos tendrán una reducción del 5% en el rendimiento neto.
Para aquellas empresas cuya facturación sea inferior a un millón de euros tributarán con respecto al impuesto de sociedades al 23%, siendo una reducción a la actual del 2%. Las empresas en régimen consolidado tendrán una medida temporal por la cual durante el 2023 serán deducibles únicamente el 50% de las pérdidas generadas por filiales integradas al grupo, a la hora de calcular la base imponible. Estas son un resumen de las medidas que incluye el paquete fiscal del Gobierno para el próximo año con la intención de lograr «un modelo más justo» de sociedad.